Como ya lo sabes el embarazo es una montaña rusa de emociones y hormonas, las cuales continúan después del parto. El proceso que se vive después puede ser incluso más fuerte a nivel emocional que el mismo embarazo por varios factores, cabe destacar que es normal que las mujeres sufran de melancolía durante los primeros quince días o poco más después del parto debido a todo los cambios que su cuerpo continúa sufriendo.
Pero la depresión pos-parto es una situación un poco más delicada que bien puede ser en un grado menor o escalar a mayor, por eso es importante que las madres acudan por ayuda de su familia y profesionales, que puedan ser apoyo para superar este estado emocional.
3 situaciones que pueden favorecer la melancolía o depresión pos-parto y cómo evitarlas:
1.- Cambios físicos
Al nacer el bebé, los niveles de hormonas (estrógeno y progesterona) de la mamá bajan rápidamente. Lo cual genera alteraciones químicas en el cerebro provocando cambios en el estado de ánimo.
Consulta a tu médico para que te ayude a nivelar las hormonas, ya sea con alimentación, ejercicio o la opción más conveniente para ti.
2.- Tratar de cubrir expectativas:
La sociedad por mucho tiempo ha hecho creer que la maternidad es perfecta y cuando las madres primerizas se topan con todos los retos que estas traen consigo, suelen entrar en un dilema donde se juzgan por no ser la mamá perfecta.
Evita cubrir expectativas y ser dura contigo misma, disfruta del proceso y da tu mejor esfuerzo. Te sorprenderías de saber que muchas mujeres pasan por esto y justo las que son amables y agradecidas con ellas mismas y su pareja, por todo el esfuerzo que hacen, se convierten en las mujeres más felices del mundo.
3.- No descansar lo suficiente
La falta constante de sueño puede generar incomodidad física y agotamiento, factores que pueden contribuir a los síntomas de la depresión pos-parto.
Pide a tu pareja y familia que te apoyen durante el tiempo que sea necesario para poder descansar y recuperarte.
Recuerda que para ser padres se aprende día con día y es importante que estés bien a nivel físico y emocional para que puedas darle lo mejor de ti a tu bebé, y contribuir a su sano desarrollo. Continúa en nuestro blog y descubre más acerca de las distintas etapas de la maternidad.